Comenzar en la wicca es como acceder a una puerta que te lleva a nuevas partes de tu propio ser, descubriendo una profundidad de la que podías no tener idea, o de la que añoraste toda tu vida.
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| "...Como del que entra por vez primera a un bosque oscuro." |
El sentimiento al comenzar en la wicca es complejo. Es una mezcla de emoción, expectativa, misterio, tal vez con un pequeño ápice de miedo, como del que entra por vez primera a un bosque oscuro. Sin embargo, lo particular es que a la vez se siente uno como regresando a casa, aun conociendo cosas que en su vida jamás había leído, visto o escuchado.
Comenzar en la wicca es como acceder a una puerta que te lleva a nuevas partes de tu propio ser, descubriendo una profundidad de la que podías no tener idea, o de la que añoraste toda tu vida.
En ese momento el vínculo se consuma, antes de saber dos palabras, antes de analizarlo y de enloquecer con el éxtasis de una celebración de luna llena. Antes de conocer cualquier cosa sobre la religión, uno siente que ha llegado a casa, que ha seguido correctamente el llamado, que las señales fueron lo suficientemente claras o que las ha sabido seguir correctamente.
Esa chispa, ese inicio, creo yo que es la primera y verdadera iniciación. Ahí solo, viéndose los pies descalzos ante un camino que aunque no conoces, confiarás que es seguro y lleno de espíritu, de esencia natural y descubrimiento.
Y es que cuando uno comienza en la wicca además de comenzar a conocer la religión está conociéndose a sí mismo; pues conocer la wicca no es caminar hacia afuera, sino hacia dentro, despertar.
Sin embargo, aunque nos aferremos a esto, las mareas pueden ser fuertes en el camino del conocimiento y uno debe navegar muy alerta, atento a los vientos buscando no encallar en sitios peligrosos o salir en plena tormenta retando al mar a que nos hunda. Es entonces cuando algunos buscan desesperadamente una brújula, un guía, alguien que responda a todas nuestras dudas, tratando de echar un poco de luz en esa noche oscura; otros se regocijan en la oscuridad, sabiendo que sus instintos los guiarán entre la bruma.
Ese camino, que ha seguido el chamán, que ha seguido el ermitaño, el sabio, el buscador y el loco es aquél que sigue también el verdadero estudiante de la wicca. El camino hacia el autodescubrimiento por medio del conocimiento de lo que nos ha dado vida: La Madre Naturaleza.
Muchas veces he dicho, y lo repito; que la wicca es un camino solitario y autodidacta. Así estés en un coven o te guíe la persona más experimentada; el camino en la wicca siempre lo caminarás tu, nadie dará los pasos por ti ni deberás escuchar a nadie ni nada más antes que a tu guía interior.
Y esa será la luz, TU luz. Esa será la que ilumine tu camino, la que cuando llegues a una encrucijada de Hécate sepa hacia donde seguir. Así que para ti que estás comenzando, recuerda que el camino es eterno y que no hay más meta más que crecer mientras uno va caminando la senda. Con la frente en alto, alerta, atento y astuto, sigue los pasos de la loba blanca, tú guía salvaje.
Esta es mi recomendación para quien inicia. Se fiel a ti mismo a través de tu Verdadera Voluntad.
Sigue tu destino, haz tu Verdadera Voluntad mientras a nadie dañes.
Crédito de la imagen: Paperblue (Jae-Cheol Parka) - Night Forest Castle (Gunster)
